RUTAS DESTACADAS

A 113 kilómetros al sureste de la capital regional, Iquique, se encuentra el oasis de Pica, que en lengua aymara significa una “flor en la arena”. Su clima, su silencio y sus aromas por sí solos te provocarán una sensación de tranquilidad, estado ideal para visitar la Cocha Resbaladero. La Cocha es una conocida terma natural enclavada en lo alto del pueblo, cuya temperatura de sus aguas varía entre 27º y 30º Celsius. No solo el poder relajante del agua es lo que llama la atención de sus visitantes, también dos socavones naturales a un costado que a todos les despierta curiosidad por saber hasta donde se puede avanzar sin que se pierda la respiración.

A sus rocas también se le atribuyen poderes purificadores para la piel, por eso es normal ver a los turistas raspando las rocas con una piedra para obtener una pasta café y aplicarla sobre el rostro. “Kocha” en Quechua significa estanque, laguna. De ahí su nombre. Puedes disfrutar de este exquisito baño por $3.000 y fotografiarte con unas gigantes frutas en la entrada del recinto.

Luego de un par de horas de disfrute es hora de deleitarse con la gastronomía local. Ahora te darás cuenta por qué están esas frutas en la Cocha. Mango, guayaba, naranja, maracuyá y el mundialmente conocido Limón de Pica, el primer producto en Chile en obtener el registro de indicación geográfica. Puedes saborearlas en jugos, sours, mermeladas y helados… ¡Te recomendamos todos los formatos! Los precios van desde los $1.500 en adelante.

Otro producto alimenticio inédito de esta zona es el alfajor de Matilla, un confite artesanal producido en base a mermeladas del lugar y finas hojas de masa. Puedes comprar 5 unidades por $1.000.

Si vas al mirador de Pica contemplarás uno de los atardeceres más hermosos que podrás conocer y recorrer algunas chacras con el permiso de sus dueños, o buscar un alojamiento rural en donde puedas hacerlo más tranquilamente, como por ejemplo en las cabañas Atahualpa, en donde duermes por $45.000. ¡Nos olvidamos contarte algo importante! Para llegar a Pica puedes tomar un minibús en el centro de Iquique por $2.500.

Luego de un día lleno de actividades en la comuna del limón, a la jornada siguiente puedes trasladarte a unos 140 km. al noroeste de Pica. A 4.200 m.s.n.m se encuentra un pequeño pueblo altiplánico llamado Lirima.

Sus casas de adobe, su iglesia y la naturaleza que la rodea son atractivos memorables para el turista, sin embargo, su encanto principal son sus termas, piscina natural de unos 50 metros cuadrados y 1 metro de profundidad que contienen aguas de unos 35°C. Está rodeada por altas montañas, un escenario que lo transforma en una experiencia aún más relajante y hasta curativa, sobre todo para aquellos que sufren malestares musculares. Para llegar a este lugar es recomendable ir en vehículo 4×4 (costo aproximado $60.000). También puedes acceder a un tour desde Iquique por $40.000, que además te lleva hacia el Salar del Huasco.

DESCANSAR EN RANCHOS Y CABAÑAS ECOLÓGICAS

Luego de vivir una agradable experiencia en Pica durante 2 días, debes trasladarte hacia Pozo Almonte. Pero antes de llegar a ese destino debes alojar un par de días en algunos de los espacios de recogimiento y descanso que ofrece la localidad de La Huayca.

Alojar en el desierto en las cabañas circulares de Challakrolo, espectacular solar turístico ecológico en donde puedes realizar agroturismo, pastoreo de animales o excursiones guiadas por los bosques de tamarugo; Camping El Huarango con sus cabañas construidas a bases de costras de sal de los antiguos salares del sector, materiales reciclados y que funciona 100% con energía solar, un recinto inserto en un bosque de tamarugos y bajo un cielo estrellado; el Rancho Kokoye, con su eco piscina, granja interactiva, cabañas de container, y exquisitas preparaciones en horno de barro; en Tantakuy Eco Experience, con sus confortables domos geodésicoso, mágicos espacios y ambiente 100% de relajo; o Cabañas La Familia, de Paola y Silvio, en donde lanzarte en un canopi, dormir en una de sus hamacas o disfrutar de una fogata al aire libre mirando las estrellas.

Luego de disfrutar tu estadía en los ranchos y cabañas ecológicas de la zona, te recomendamos visitar otra localidad de Pozo Almonte. Si las fuentes termales te provocaron sensaciones positivas entonces debes conocer el pueblo de Mamiña. En lo alto de un valle, en medio de los cerros y un clima templado, se encuentran las Termas de Mamiña, aguas terapéuticas ideales para los turistas que buscan una jornada de relajo, no solo producida por sus cálidas aguas, sino también por el sol y una privilegiada vista del hermoso paisaje desértico que rodea el centro termal denominado Barros Chinos, lugar donde los visitantes se aplican un milagroso barro sobre la piel, para luego desprenderlo con un baño termal que deja la piel totalmente suave y rejuvenecida. El precio de las entradas alcanza los $3.000.

Los Baños de Ipla son otra de las reconocidas fuentes termales de Mamiña, que se caracterizan por contar con piscinas naturales individuales. Sus aguas brotan a una temperatura promedio de 45º C y son recomendadas para el tratamiento de dolencias articulares y musculares. Para acceder a Mamiña, ubicada a 73 km. al este de Pozo Almonte, es posible hacerlo en vehículos que salen del centro de Iquique (llegas a Pozo por $2.000 y luego consultas la tarifa a los taxis amarillos), algún tour operador (desde $35.000) o en vehículo particular (precio similar). Alojar en unos de sus hoteles simples, pero cómodos tiene un valor cercano a los $20.000.

CHUSMIZA, EL PASO PREVIO PARA LLEGAR AL ALTIPLANO

Si piensas que hasta aquí llegó nuestra ruta wellness, te equivocas. Continuamos hacia la comuna de Huara, específicamente a la localidad de Chusmiza, a unos 120 kilómetros al noreste de Pozo Almonte. Allí podrás encantarte con este pequeño poblado (no más de 25 personas viven en él), que dentro de sus principales atractivos tiene a las famosas termas de Chusmiza (valor ingreso $2.000), aguas de 43° Celsius a las que se le atribuyen poderes curativos para malestares musculares y óseos. Está ubicada a 500 metros del pueblo y se compone por piscinas termales de tina, barro y vapor, y cuenta con zona de camping. Es recomendable alojar al menos una noche en las cabañas Munata Chusmiza ($35.000 por noche), de Soledad Carvajal. Ella te podrá mostrar parte del pueblo, acompañar a realizar trekking por el cerro Chapire o pastorear a las llamas que posee.

Chusmiza es el punto ideal para aclimatarse antes de continuar camino hacia el altiplano. ¡Y hacia allá vamos!

COLCHANE: TERMAS, DEPORTES, RELAJO Y DELICIAS

Al llegar a Colchane es probable que tu corazón empiece a latir más rápido de lo común, no solo porque estarás a más de 4 mil metros de altura, sino porque el paisaje y el contraste de colores que existe en el lugar harán que te emociones.

Dos pozas de naturales de aguas cristalinas que emergen del suelo, con temperaturas de 30°C y un cielo celeste que completa el cuadro, conforman las Termas de Enquelga, un lugar ideal para relajarse y apreciar la inmensidad de la naturaleza, a unos 3.700 msnm. Además de disfrutar de un relajante baño al aire libre, te quedará tiempo para recorrer otros atractivos del Parque Nacional Volcán Isluga y disfrutar de la inmensidad del altiplano chileno.

Un tour de un día ofrecido por Tata Inti tiene un valor de $70.000, pero es probable que baje el costo si te encuentras en Colchane y particularmente en su hostal. En ese tour recorres los geiseres de Puchuldiza, Laguna Arabilla, Cariquima, el Salar de Coipasa, Bosque de Cactus Gigantes, Bofedal de Umiña y el Valle de la Felicidad. Recuerda que puedes llegar desde Iquique por $7.000 en los buses internacionales. Desde Huara puedes consultar en la municipalidad si hay particulares que puedan trasladarte por un precio a convenir.

Durante la noche te recomendamos alojar en el Hotel Inka Takhi, cuya habitación single tiene un costo de $22.000.

El segundo día en Colchane debes destinarlo para conocer otra de las termas imperdibles de Colchane, ubicada al otro extremo de la comuna: las aguas termales de Ancuaque. Se trata de una pequeña poza natural que emerge desde la tierra. Quizás no es tan cálida como las otras termas de la Provincia y no sea recomendable darse un baño en invierno, pero si puede disfrutarse durante el resto del año y aprovechar de disfrutar del silencio, las montañas y paisajes que no podrás olvidar.

Luego del relajante baño recomiendo que te traslades a la localidad de Chulluncani, para visitar a don Eugenio Challapa, con quien podrás convertirte en un pastor Aymara trasladando a sus llamas, escuchar su música andina y sus relatos de la cultura aymara, mientras nos muestra distintos vestigios y paisajes. Ideal es que puedas pernoctar en el alojamiento Pachamama también de don Eugenio y aislarte de todo. Esto tiene un costo de $25.000 (los otros servicios tienen costos similares) e incluye todas las comidas.

Si quieres conocer el proceso de producción de la quínoa, probar una empanada de chuño y ayudar a prepararla o elaborar adobe, debes acudir a la Red de Turismo Rural Aymar Markasaru. Compuesta por emprendedores turísticos oriundos de la zona, esta es una gran oportunidad para conectarte aún más con la comunidad aymara. Por ejemplo puedes degustar algún plato típico y ser recibido con la ceremonia de la Pawa con Flora Aguirre; participar de un entretenido taller de tejido andino y confeccionar algún poncho o gorro con Teófila Challapa; o conocer el mundo de la construcción de adobe y practicarlo con don Alipio Castro. Todos los servicios disponibles y sus respectivos valores podrás encontrarlos en https://www.aymarmarkasaru.cl

Con este popurrí de actividades saludables, de disfrute y relajación finaliza la Ruta del Bienestar, la cual podrás completar entre 8 y 11 días. ¡Disfrútala!